El Brull es un pequeño municipio de la comarca de Osona, situado en el extremo sur, en la zona del Pla de la Calma, formando parte del entorno del Macizo del Montseny. Es conocido por su entorno natural de alta montaña y por la presencia de vestigios históricos y arqueológicos importantes, ofreciendo un paisaje típicamente prepirenaico con bosques frondosos y vistas extensas.
Los orígenes documentados de El Brull se remontan al siglo X. La primera mención histórica fiable data del año 934, relacionada con el Castillo de El Brull, que fue un punto estratégico de defensa y control territorial. El término municipal se desarrolló alrededor de la parroquia de Sant Martí. Durante la edad media, el castillo y su término estuvieron ligados a la baronía de Montseny. El municipio mantuvo una estructura rural y dispersa, con masías esparcidas por su territorio, y posteriormente anexionó el término de Viladrover.
Es la iglesia parroquial del municipio. Aunque ha sufrido diversas reformas a lo largo de los siglos, conserva elementos de su estructura románica original. Está documentada desde el siglo XI y constituye el núcleo histórico del pueblo.
Actualmente se encuentra en estado de ruina, pero sus restos son un testimonio de la importancia defensiva del lugar durante la época medieval. Los restos del castillo, situados en un punto elevado, permiten entender su función de vigilancia sobre el territorio de Osona y el Vallès.
Antigua parroquia del término de Viladrover, hoy anexionado a El Brull. Es un templo de origen románico, documentado desde el siglo XI, que destaca por su sencillez y su ubicación en un entorno natural aislado.
Aunque a menudo se asocia a Osona, este importante yacimiento arqueológico (uno de los más grandes de Cataluña) se encuentra muy cerca del término de El Brull, en el Pla de la Calma. Se trata de los restos de un asentamiento ibérico que estuvo activo entre los siglos IV y II aC, ofreciendo una visión crucial de la cultura layetana.
El Brull está situado en una altiplanicie que forma parte de la transición entre la Plana de Vic y el Macizo del Montseny, declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO. El entorno natural está dominado por bosques de robles, hayas y pinos, especialmente en las zonas más altas. El municipio es un punto de partida ideal para rutas de senderismo y cicloturismo. Diversos senderos de Gran Recorrido (GR) atraviesan el término, conectando con otros puntos de interés del Montseny y el Pla de la Calma, como el Matagalls o el Turó de Tagamanent.
El Brull es accesible principalmente por carretera. La vía más habitual es desde la C-17 (eje Vic-Barcelona), tomando la salida hacia Seva y siguiendo por la carretera local BV-5301, que asciende hasta el municipio. Dada su altitud y su ubicación en una zona de montaña, se recomienda consultar el estado de las carreteras en época invernal.
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