Castellar del Vallès es un municipio situado en la comarca del Vallès Occidental, conocido por su rico pasado industrial, especialmente ligado al sector textil, y por su ubicación privilegiada a orillas del río Ripoll. Ofrece una combinación de elementos históricos, patrimoniales y un entorno natural ideal para el excursionismo.
Los orígenes de Castellar del Vallès se remontan a la época medieval. La primera referencia documental del lugar data del año 963, cuando se menciona el Castillo de Castellar (o Castell de Clasquerí). El núcleo urbano se desarrolló inicialmente alrededor de la antigua iglesia de Sant Esteve, cerca del castillo. Durante los siglos posteriores, la vida del pueblo estuvo marcada por la agricultura y, posteriormente, por la industrialización. En el siglo XIX, Castellar se convirtió en un importante centro textil gracias a la fuerza hidráulica del río Ripoll, con la familia Tolrà jugando un papel clave en este desarrollo.
Documentado desde el siglo X, es el punto de origen del municipio. A pesar de ser de propiedad privada, su silueta es un elemento icónico del paisaje. Se encuentra en una colina dominando el valle del Ripoll. Sus estructuras actuales reflejan diversas reformas a lo largo de los siglos, conservando elementos medievales.
La actual iglesia parroquial es una construcción imponente de estilo neogótico y modernista, inaugurada a principios del siglo XX (1913), que sustituyó a la antigua iglesia románica. Destaca por su gran nave y su campanario.
Antigua residencia de la familia Tolrà, una de las estirpes industriales más influyentes de Castellar. Este edificio señorial, construido en el siglo XIX, es un ejemplo de la arquitectura burguesa de la época y actualmente acoge dependencias municipales y culturales.
Puente medieval que cruza el río Ripoll. Aunque ha sido restaurado y modificado a lo largo del tiempo, conserva su estructura original y es un testimonio de las antiguas vías de comunicación que conectaban el pueblo con las zonas industriales y agrícolas.
Situada cerca del castillo, se conservan los restos de la antigua iglesia románica que fue el centro religioso del municipio hasta la construcción del nuevo templo en el núcleo urbano. Es un lugar de interés histórico y arqueológico.
Castellar del Vallès se encuentra en un entorno natural rico, marcado por el paso del río Ripoll, que ha modelado el valle y ha permitido el desarrollo de la vegetación de ribera. El término municipal limita con zonas boscosas que forman parte de la influencia del Parque Natural de Sant Llorenç del Munt i l'Obac. Hay numerosas rutas de senderismo y BTT que permiten explorar los bosques de pinos y encinas, así como descubrir antiguos molinos y masías. La Riera de Canyelles es otro elemento hidrológico destacado, ofreciendo paisajes frescos y húmedos.
Castellar del Vallès es accesible principalmente por carretera. La vía principal de acceso es la C-1415a, que la conecta directamente con Sabadell. Aunque el municipio no dispone de conexión ferroviaria propia, la estación de tren más cercana es la de Sabadell (Rodalies Renfe y FGC), desde donde se puede acceder a Castellar mediante servicios regulares de autobús interurbano (operados por Moventis/Sarbus). También es accesible desde Terrassa por carreteras secundarias.
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