Peralada es un municipio situado en la comarca del Alt Empordà, conocido principalmente por su imponente castillo, su rica historia medieval y su tradición vinícola, formando parte de la Denominación de Origen Empordà. Es un centro cultural destacado gracias a su reconocido Festival Internacional de Música, que se celebra cada verano.
Peralada tiene sus orígenes documentados en el siglo IX, convirtiéndose en la capital del Condado de Peralada. Fue un núcleo de gran importancia durante la época medieval. En el año 1285, durante la Cruzada contra la Corona de Aragón, la villa y el castillo originales fueron prácticamente destruidos por las tropas francesas de Felipe el Atrevido. La villa fue reconstruida posteriormente, manteniendo su carácter señorial y su trazado histórico, especialmente a partir del siglo XIV, bajo el dominio de los vizcondes de Rocabertí, que mantuvieron el título de condes de Peralada.
El Castillo de Peralada es el edificio más emblemático del municipio. Aunque la estructura actual data principalmente de los siglos XIV y XV (reconstruido después de la destrucción de 1285), conserva elementos anteriores. Actualmente, el recinto acoge un prestigioso casino, una biblioteca histórica con más de 100.000 volúmenes y es la sede del Festival Internacional de Música Castillo de Peralada.
Adosado al castillo, el Convento del Carmen es un conjunto arquitectónico que incluye la iglesia gótica y el claustro. El recinto acoge el Museo del Castillo de Peralada, que expone colecciones de vidrio, cerámica, pintura y una importante colección de vinos y cavas, reflejando la tradición vinícola de la familia propietaria.
Este claustro románico, declarado Bien Cultural de Interés Nacional, es el único vestigio que se conserva del antiguo convento de Sant Domènec, fundado en el siglo XIII. Destaca por su galería de columnas y capiteles esculpidos con motivos vegetales y figurativos, siendo uno de los ejemplos más notables del románico tardío en el Empordà.
Situada en el núcleo antiguo, la Iglesia de Sant Martí es la iglesia parroquial de Peralada. Aunque tiene orígenes románicos, el edificio actual presenta una estructura gótica, fruto de las reconstrucciones posteriores a la destrucción de 1285. Destaca su campanario y su integración en el paisaje urbano medieval.
El centro de Peralada conserva un trazado medieval con calles estrechas y edificios históricos. Todavía se pueden observar tramos de la antigua muralla y algunas de las puertas de acceso a la villa, como el Portal de la Font, que atestiguan la importancia defensiva que tuvo la población.
Peralada se encuentra en una zona de transición entre la llanura del Empordà y las zonas más cercanas al macizo de la Albera. Su entorno está marcado por la presencia de viñedos extensos, ya que el municipio es un punto clave de la Ruta del Vino de la DO Empordà. Aunque no se encuentra directamente dentro del Parque Natural dels Aiguamolls de l'Empordà, su proximidad (a pocos kilómetros) permite el acceso a rutas de senderismo y cicloturismo que exploran la llanura ampurdanesa y la cuenca del río Muga.
Peralada es accesible principalmente por carretera. Se encuentra a poca distancia de Figueres, que es un importante nudo de comunicaciones. Desde la autopista AP-7 (salida 3, Figueres Nord), se puede acceder a través de la carretera C-260 en dirección a Roses, tomando el desvío hacia Peralada. La proximidad a Figueres facilita el acceso a la estación de tren de alta velocidad (AVE) y a la red de trenes regionales.
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