Sant Climent de Llobregat es un municipio situado en la comarca del Baix Llobregat, conocido por su paisaje agrícola dominado por la montaña y, especialmente, por el cultivo de la cereza, siendo uno de los principales productores de este fruto en la zona. El pueblo mantiene un carácter rural y tranquilo, a pesar de su proximidad al área metropolitana de Barcelona.
Los orígenes de Sant Climent se remontan a la época medieval. La primera documentación de la parroquia de Sant Climent data del año 970, cuando se hace referencia a la iglesia. Históricamente, el municipio ha estado ligado a la agricultura y formó parte de la baronía de Cervelló. Durante siglos, la economía se basó en el cultivo de secano, hasta que la especialización en la cereza marcó profundamente su identidad a partir del siglo XX.
Edificio de origen románico, aunque la estructura actual es fruto de diversas reformas y ampliaciones realizadas principalmente durante los siglos XVII y XVIII. Conserva elementos de la antigua construcción y es el centro histórico y espiritual del núcleo urbano.
Situada en la cima de una colina, esta ermita ofrece una vista panorámica excelente sobre el delta del Llobregat, la costa y la comarca. Es un lugar popular para excursiones y un punto de referencia visual del municipio. La ermita actual data del siglo XIX, construida sobre una capilla anterior.
Formado por las calles estrechas y empinadas que rodean la iglesia, el núcleo antiguo muestra la arquitectura tradicional del pueblo, con casas de piedra y un ambiente tranquilo que refleja el pasado rural de Sant Climent.
Sant Climent se encuentra en un entorno natural privilegiado, situado entre el valle del Llobregat y las primeras elevaciones del Macizo del Garraf y la Sierra de l'Ordal. El paisaje está definido por los bosques mediterráneos (pinos y encinas) y, sobre todo, por los extensos campos de cerezos que florecen espectacularmente en primavera. Hay diversas rutas de senderismo y BTT que permiten explorar el entorno, conectando con caminos que llevan a la Penya del Moro o a la Ermita de Sant Ramon, ideales para disfrutar de la flora y la fauna locales.
Sant Climent de Llobregat es accesible principalmente por carretera. Se llega mediante la carretera local BV-2002, que conecta con municipios vecinos como Sant Boi de Llobregat y Viladecans, y con las principales vías rápidas de la zona (C-32 y A-2). En cuanto al transporte público, diversas líneas de autobús (operadas por empresas como Mohn) conectan el municipio con Barcelona y otras localidades del Baix Llobregat, facilitando el acceso sin vehículo privado.
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