La Vall de Bianya es un extenso municipio de la comarca de la Garrotxa, conocido por su dispersión geográfica, ya que agrupa once núcleos de población históricos (o parroquias) en un amplio valle. Este territorio, rico en paisaje y patrimonio románico, forma parte del Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa y es un punto clave para el excursionismo y la tranquilidad rural.
Los orígenes de La Vall de Bianya se remontan a la época romana, ya que la antigua Vía Annia (o Vía Romana del Capsacosta) atravesaba el territorio, conectando la llanura de Vic con la de Olot y la zona de la Cerdanya. Documentada desde el siglo X, el valle estaba originalmente dividido en varias parroquias independientes (como Sant Pere Despuig, Sant Martí de Solamal o Santa Margarida de Bianya). La configuración municipal actual es el resultado de la unión administrativa de estos pequeños núcleos a lo largo de los siglos XIX y XX, manteniendo su identidad rural y su riqueza arquitectónica románica.
Uno de los elementos patrimoniales más destacados. Se trata de un tramo bien conservado de la antigua calzada romana que pasaba por el valle. Todavía hoy se pueden observar tramos del empedrado original y los muros de contención, especialmente en la zona de Capsacosta, siendo una ruta de interés histórico y senderista.
Considerada una de las iglesias románicas más importantes del municipio. Data del siglo XII y destaca por su ábside semicircular y su campanario de torre. Está situada en uno de los núcleos históricos que da nombre a la parroquia.
Iglesia románica documentada desde el siglo X, aunque el edificio actual es mayoritariamente del siglo XII. Es un punto de referencia en el valle y mantiene su estructura original, con un portal de entrada sencillo pero elegante.
Otra de las once parroquias históricas. Esta iglesia románica, con modificaciones posteriores, destaca por su ubicación y su relevancia histórica dentro de la estructura eclesiástica del valle.
Antiguo molino harinero situado cerca de la riera de Bianya. Aunque actualmente no está en funcionamiento, es un testimonio de la actividad preindustrial y agrícola tradicional de la zona.
La Vall de Bianya se encuentra encajada entre la Sierra de Sant Miquel del Mont y la Sierra de Malforat, y es atravesada por la Riera de Bianya, que da nombre al municipio. Gran parte de su territorio forma parte de la zona periférica del Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa, ofreciendo un paisaje de bosques frondosos (encinas y robles) y prados. Es un lugar ideal para rutas de senderismo y BTT. El sendero de Gran Recorrido GR-2, que une La Jonquera con Sant Joan de les Abadesses, pasa por el valle, ofreciendo conexiones con Olot y el resto de la Garrotxa.
La Vall de Bianya es accesible principalmente por carretera. La vía más importante es la autovía A-26 (que enlaza con la C-26), que conecta el municipio directamente con Olot (la capital comarcal) y con Ripoll y Besalú. No dispone de estación de tren propia. El transporte público se limita a líneas de autobús que conectan los núcleos principales con Olot.
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