Vilalba Sasserra es un pequeño municipio situado en el extremo nordeste de la comarca del Vallès Oriental, en la provincia de Barcelona. Limita con la comarca de la Selva y se caracteriza por su marcado carácter rural y su proximidad al Parque Natural del Montnegre i el Corredor, ofreciendo un entorno tranquilo y natural.
Los orígenes de Vilalba Sasserra se remontan a la época medieval. El topónimo "Sasserra" proviene del castillo o torre que dominaba la zona, documentado ya en el siglo X. La historia del municipio está estrechamente ligada a la parroquia de Sant Miquel y a la jurisdicción feudal del Castillo de Sasserra. Durante siglos, la economía se basó principalmente en la agricultura de secano y la ganadería, manteniendo una estructura de poblamiento disperso basado en masías.
Esta es la iglesia principal del municipio. Aunque sus orígenes son románicos (siglo XI), el edificio actual presenta numerosas modificaciones realizadas principalmente durante los siglos XVII y XVIII, que le confirieron un aspecto barroco. Conserva elementos de su estructura original y es el centro del núcleo histórico.
Situadas en una colina cercana al núcleo urbano, actualmente solo se conservan restos de la torre de defensa y algunos fragmentos de muros que formaban parte de la antigua fortificación medieval que daba nombre al municipio. Ofrecen una vista panorámica del entorno.
El núcleo urbano de Vilalba Sasserra es pequeño y se desarrolla alrededor de la iglesia. El término municipal destaca por la presencia de diversas masías históricas dispersas, algunas de las cuales conservan su arquitectura tradicional catalana, como Can Ribes o Can Riera.
Vilalba Sasserra se encuentra en una zona de transición entre la llanura vallesana y los relieves del macizo del Montnegre. Gran parte de su territorio forma parte del ámbito de influencia del Parque Natural del Montnegre i el Corredor, hecho que garantiza un paisaje rico en bosques de pinos y encinas. El municipio es atravesado por la Riera de Vilalba, un curso de agua que contribuye a la biodiversidad local. El entorno es ideal para la práctica de senderismo, rutas de BTT y paseos tranquilos, conectando con los caminos rurales que llevan hacia Sant Celoni o Llinars del Vallès.
Vilalba Sasserra es accesible principalmente por carretera. La vía más importante para llegar es la carretera C-35 (que conecta con la C-60 y la AP-7), desde la cual hay que tomar desvíos locales. No dispone de estación de tren propia, siendo las estaciones más cercanas las de Llinars del Vallès o Sant Celoni (línea R2 Nord de Rodalies de Catalunya).
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